jueves, 25 de junio de 2009

Desarrollo Infantil

Durante años, se han realizado investigaciones y estudios a nivel psicológico, social, familiar, entre otros, con niños en post de establecer etapas que definan los procesos, por los cuales pasan desde su concepción hasta que son adolescentes. Por este motivo, hemos realizado un video explicativo, mediante el cual se presentan diferentes teorías del desarrollo infantil de autores tales como Jean Piaget, Julián de Ajuriaguerra, David Gallahue, Lev Vigotsky y Henri Wallon. Las etapas descritas, han sido divididas para una mejor comprensión de la siguiente forma:
  • 0-2 años
  • 2-3 años
  • 4-6 años
  • 6-9 años
  • 7-12 años

Esperamos que disfrutes nuestro video: http://www.youtube.com/watch?v=SjBlsBzHtc0



Estefanía Alderete
Tania Garrido
Rodolfo Gutiérrez
Fernanda Gutiérrez

jueves, 11 de junio de 2009

Aprender Jugando

Muchas veces no encontramos la forma de abordar a un niño, de cómo entender sus sentimientos y su mundo, ni sabemos cómo utilizar nuestras experiencias de adultos como una herramienta a favor del desarrollo infantil. Sin embargo, la tarea se nos hace fácil cuando de juegos se trata.
El juego es un método práctico y útil, que ha estado presente desde los inicios del ser humano para practicar y aprender, de manera didáctica, asuntos básicos desde el ponerse de pie, hasta complejos temas de pensamiento abstracto. De este modo, el juego es fundamental en la etapa de aprendizaje del niño, ya que dentro de este proceso cumple una función de andamiaje. ¿Por qué andamiaje?, porque nuestra participación dentro del juego de un niño es fundamental a la hora de guiar al infante, de manera que se cumpla la funcionalidad educativa del juego. De esta forma, podemos incentivar, respaldar y brindar seguridad al niño en situaciones que no pueda resolver solo, entregándole herramientas didácticas que fomenten su capacidad de aprendizaje y autonomía. Por lo demás, al abordar a los pequeños desde su propio entorno, es más probable tener una mayor influencia en las experiencias que estos vivan, y de esta forma generar emociones más profundas al hacerlos sentir dentro de una relación más íntima y empática, en la que se comparten momentos de placer (a través del juego). Como consecuencia de esta interacción le otorgamos a los niños una sensación de mayor seguridad, potenciando su autoestima y autoconfianza, que va de la mano con obtener nuevas herramientas para relacionar, interpretar, analizar, es decir, generar instancias de aprendizaje a través de la emocionalidad.